El regreso del futbol profesional
a la capital del Estado ha marcado la pauta sobre lo que la gente aficionada al
futbol requiere como un espectáculo deportivo, ya que de inmediato el llamado
“jugador número 12” ha mandado un mensaje bien claro a la directiva de los
Cimarrones de Sonora, pues de darse buenos resultados en este naciente proyecto
con auténtica sangre sonorense, seguramente seguirán atiborrando las tribunas
ya sea del Estadio Sonora o del Héroe de Nacozari.
Nadie en todo Hermosillo esperaba
ver a tanta gente reunida para ver el partido inaugural de la Segunda División
Premier en estas tierras, en donde la escuadra campeona de la división inferior
recibía a los Dorados de la Universidad Autónoma de Chihuahua, y es que la
sorpresa fue mayúscula cuando ya iniciado el juego el inmueble edificado para
la Serie del Caribe de este mimos año, lucía un aforo de más de ocho mil
espectadores, cosa que definitivamente hay que agradecer y celebrar.
El juego se quedó algo corto
respecto a la expectativa generada en la tribuna, pues a pesar de realizar
buenas jugadas y despertar incontables emociones, el resultado al final no fue
el esperado y con penal fallado incluido por conducto del “Diablo” García, las
huestes de Enrique Ferreira tuvieron que conformarse con un desabrido empate,
que nadie quería, que nadie esperaba y que por supuesto a nadie dejó contento,
cosa que habrá que revetir de inmediato el próximo viernes en el encuentro de la fecha 3 cuando
Cimarrones reciban a Coras de Tepic.
De lo sobresaliente y lo que le
da esperanzas a los aficionados, es que las opciones de gol fueron fabricadas y
los dos delanteros de los locales, Jesús “Jesi” Silva y César Macías tuvieron
sus oportunidades de perforar la valla enemiga, principalmente el de Agua
Prieta, quien no salió fino y desperdició tres opciones claras ante el arquero
chihuahuense, además de un remate de cabeza al travesaño de Osvaldo González y
una terna de tiros de larga distancia de Ángel Conde, Alejandro Arbayo y Manuel
Ignacio Guerra.
Pero hubo otros jugadores que
merecen una mención aparte, quienes fueron los que más dolores de cabeza le
causaron al técnico visitante, Óscar Rivera se cansó de llegar a línea final
por la banda derecha y pudo mandar un par de centros interesantes que
evidenciaron las fallas defensivas de Dorados, estuvo punzante todo el juego y
cada vez se ve mejor, con madurez y seguridad, además que dará su aporte
goleador con la potente pierna derecha que posee.
Arnhold Rivas dio muestras de su
calidad y del por qué fue invitado a este proyecto, hizo vibrar a la tribuna
con algunas jugadas de lujo y se dio tiempo para repartir todo el juego en el
medio campo, será sin duda el referente del equipo y solo es cuestión de tiempo
para que se acabe de entender con sus delanteros para que empiecen a fluir las
buenas maneras del trato del balón y de la claridad al frente.
Alfredo Vázquez en el medio campo
es un excelente complemento de Rivas, pues es el que le apoya, primero en la
recuperación y luego en la distribución del juego, además que se dio el lujo de
meter el histórico primer gol de la institución en este circuito y lo hizo como
crack, pues de tres cuartos de cancha se
mandó un tiro de tres dedos pegado al poste, imposible para el arquero rival.
Pero el que para mí fue el
jugador del partido fue Alejandro Arbayo, un medio de contención que nunca para
de correr y a base de meter la pierna con autoridad y de estar involucrado en
todas las jugadas ofensivas y defensivas en el medio campo de Cimarrones, hasta
puso en jaque al rival con disparos de larga distancia, sin duda una gran
incorporación de el futbol amateur de la ciudad, dando muestras del buen nivel
con el que se cuenta en la Liga Premier de Hermosillo, pues junto con Iván
Acuña, Cristóbal Vargas, Rodrigo Miranda y Christian Segura llegaron al club
por la misma vía.
El panorama sin duda se irá
aclarando para el técnico Cimarrón y los resultados vendrán de a poco, pues el
material humano es de muy buena calidad y balanceado, ya que la experiencia y
la juventud se amalgaman interesantemente para conformar un grupo que dará
batalla y le traerá alegrías a la gran afición al futbol que existe en
Hermosillo y que con el esfuerzo de una directiva entusiasta y con el gusto por
este deporte, los Cimarrones pronto legarán a la cima de la montaña.
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