Las distancias en el
centro del país hacen más factibles los éxitos deportivos, ya que son mucho más
cortas que en la parte norte
Finalmente quedaron definidos los dos equipos de la Tercera
División Profesional que subieron de categoría, al haberse disputado la gran
final por el ascenso el fin de semana pasado en la ciudad de Torreón, Coahuila
entre el Calor de San Pedro y Real Cuautitlán.
Fueron los del Estado de México, el Real Cuautitlán quienes
lograron el ascenso, luego de ganar la final 2-1 en el global, a la Segunda
División en su categoría Premier de Ascenso y los coahuilenses subieron a la
Segunda División, pero a la categoría de Nuevos Valores, la cual no pelea por
subir a la Liga de Ascenso, antes llamada Primera “A”.
En el caso de los Rayos-López Caballero del poblado Miguel
Alemán, quedaron fuera en la ronda de octavos de final a manos de Monarcas,
Morelia y que a pesar de haber disputado solo tres llaves de liguilla, acumuló
en sus salidas a Culiacán, Sinaloa, Atotonilco el Alto, Jalisco y la capital
michoacana 8 mil kilómetros de recorrido en carretera, lo que provoca un excesivo
desgaste en los jugadores.
Este factor geográfico fue determinante para el rendimiento
de los sonorenses, el cual se vio disminuido respecto a sus actuaciones previas
y que para los equipos finalistas y principalmente para el campeón, lo que
resalta más lo logrado por los Rayos, pese a este factor.
Calor de San Pedro jugó la ronda de 32 avos ante FC Toros, a
quienes doblegó 5-3, pero sin salir de su ciudad, pues ambos equipos tienen
sede en Torreón, Coahuila; luego en los 16 avos recorrió mil 684 km. hasta
Ciudad Juárez, donde doblegó al Colegio de Bachilleres 6-0y en los octavos de
final viajó mil 724 km a Ciudad Madero para derrotar 8-5 a los Orinegros.
En los cuartos de final viajaron a Tonalá Jalisco a visitar
a los Vaqueros a quienes derrotaron 3-1 y en ese viaje recorrieron mil 392 km.; posteriormente en semifinales
viajaron mil 700 km. para visitar a Real Zamora y vencerlos 2-1 y en la gran
final viajaron mil 938 km. hasta el Estado de México en el partido de ida de la
gran final, sumando en total, contando los viajes de ida y vuelta ocho mil 438
km.
Por su parte el campeón Real Cuautitlán, tuvo un calendario
realmente cómodo en cuestión de distancias, ya que en la ronda de 32 avos
derrotó 4-1 Cuautla Yeca Juvenil, donde tuvo que desplazarse 296 km. hasta la
ciudad morelense; luego en 16 avos visitó en el propio Estado de México a
Cobijeros de Chiconcuac, a quienes derrotó 5-3 y donde solo viajó 80 km.
Luego en octavos de final visito, en su propio estado a Coyotes
Neza a quienes derrotaron 6-2 y solo recorrieron 120 km y en cuartos de final
fueron otros 160 km. para golear 9-1 a Tulyehualco en el Distrito Federal.
Fue hasta las semifinales cuando la distancia para ellos se
incrementó pues viajaron a Veracruz 704 km. para derrotar en penales 7-6 a
Langostineros de Atoyac y finalmente en la gran final ante el Calor de San
Pedro recorrieron 965 km. hasta Torreón, Coahuila , para una distancia total de
dos mil 225 km. totales.
Si se hace la engorrosa comparación de la ventaja de los
recién ascendidos por su situación geográfica es considerable, si hipotéticamente
el cálculo de kilómetros recorridos por los Rayos-López Caballero del poblado
Miguel Alemán de haber llegado hasta la final, hubiera llegado a los 17 mil
600, pero contra eso es a lo que deben
de enfrentarse los futbolistas del norte del país.