Un homenaje debería de recibir en Toluca no en la selección mexicana, digo Enrique “El ojitos” Meza debería de tener un monumento con los choriceros, pero en la Selección ¿por qué? Si cuando la dirigió estuvimos a punto de ser eliminados en la “Súper” área de Concacaf, además del ridículo de Wembley y sus “ahijados”, porque a la fiel forma de padrino de rancho, se llevó a los que quiso, o dígame usted, ¿con qué autoridad un tipo como José Manuel Abundis tira un penal en el mítico estadio contra el equipo de la Rosa? Él era un fiel escudero de una gran figura como Cardozo en Toluca, ¿en la selección? Nadie.
Y para los que no me creían quién es el mandamás y el que maneja los hilos de la selección, ¿adivinen quién puso primero a Néstor de la Torre al frente de la Comisión de Selecciones Nacionales y ahora a Efraín Flores como técnico interino? Claro, el mismísimo señor Jorge Vergara, el dueño de chivas, que ya se apoderó y desde hace mucho de la selección, y para no irnos tan lejos hay que recordar el caso del “Bofo” Bautista en Sudáfrica.
Y el caso no es que sea él, porque lo puede ser cualquier otro, sino por el modelo empresarial del Business are Business, por sobre cualquier cuestión deportiva que le ha impuesto a la selección mexicana. No le importan en lo más mínimo los resultados deportivos, y eso ya me quedó más que claro, lo suyo y lo sabe hacer muy bien, es hacer dinero, pero ¿Quién tiene la culpa…?
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