miércoles, 1 de junio de 2011

El Olimpo azulgrana


Un verdadero privilegio es el que tenemos los aficionados del futbol en todo el planeta, independientemente de la nacionalidad o al equipo al que se le vaya, pues a la hora de trascender las fronteras el Futbol Club Barcelona deleita por igual y maravilla al mundo entero con el gran juego que desarrolla partido a partido.
La exhibición de la que fuimos testigos el pasado 28 de mayo en la Final de la Champions League en el nuevo estadio de Wembley, ante el Manchester United, será recordada por varias generaciones, pues consolida a uno de los mejores equipos de todos los tiempos, sino es que el mejor, y tardará mucho para que aparezca uno que por lo menos se le acerque.
Demuestra al mismo tiempo que la forma de abastecer al primer equipo, de jugadores que dominan el estilo de juego y que están empapados de la filosofía catalana, con jóvenes de la cantera ha funcionado mucho mejor que realizar escandalosas contrataciones de figuras consagradas.
Efectivamente e ineludiblemente la comparación es con su acérrimo rival de la liga española, el Real Madrid, que representa su antípoda en todos sentidos, que aparte de ser los clubes número 1 y 2, según la clasificación de la FIFA, siempre están en constante pugna, dentro y fuera de las canchas.
Como un simple ejemplo están los casos de Sergio Busquets y Xavi Alonso, el primero surgido de la cantera catalana y el segundo contratado por el club merengue proveniente del Liverpool, las cifras entre uno y otro son muy distintas, así como los resultados, tanto en sus clubes como en la selección, el catalán es el titular de la Furia Roja.
Y qué decir de los dos mejores jugadores del mundo, y aquí ya termina la discusión de quién es el primero y quién el segundo, Lionel Messi o Cristiano Ronaldo. De igual forma el Madrid pagó las “Perlas de la Virgen” por el portugués mientras que el argentino es Culé desde niño.
Y así nos podríamos ir con todos los canteranos y que algunos son todas unas figuras de corte mundial como Xavi, Iniesta, Puyol y Piqué, que con unas cuantas incorporaciones como las de Alves y Villa forman un equipo de época y que nos regalan la máxima expresión del manejo del balón y el buen futbol asociación.
Por otro lado el Manchester United es el rankeado número tres de FIFA y todo mundo esperaba que la gran final fuera más disputada de lo que en realidad fue, y es que Barcelona salía como favorito –a mi entender– pero nunca nos imaginamos que la diferencia en el terreno de juego fuera tan abismal, en Wembley hubo un sólo equipo y era azulgrana.
La media cancha de los “Diablos Rojos”, nunca pudo hacerse de la tenencia del balón, y únicamente veían cómo los del otro equipo paseaban el esférico pegándoles un verdadero “baile” como pocos que se recuerden. El Barça parecía Neo de la película Matrix esquivando las balas a una súper velocidad.
El reconocimiento se extiende para Pep Guardiola pues ha sabido materializar la herencia de un club y de otros técnicos que colaboraron de alguna forma en lo que este equipo es actualmente, demuestra a su vez su madurez y calidad como técnico y que no le hace falta saber muchos idiomas para ser considerado uno de los mejores entrenadores del mundo.
Las controversias levantadas, principalmente por los entes madridistas, cuestionando la limpieza de los éxitos catalanes, quedan por un lado luego de la obtención de esta cuarta Copa Europea, por la forma como fue obtenida, esta final no dejó ningún margen de suspicacia, los que hablaron tuvieron que callar, Pep y sus muchachos callaron esas bocas jugando.
Afortunadamente, este equipo es muy joven y tendremos célebres actuaciones por un buen rato más, de ver esas mañanas –por el horario en México– de genialidades en la construcción del mejor futbol del planeta y las vitrinas en la ciudad Condal recibirán os reconocimientos por los triunfos obtenidos; y como dicen por allá: ¡Visca Barça!

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